Los pasados días 7, 8 y 9 de junio tuvo lugar en Oporto el NOS Primavera Sound 2018. Aquí os contamos nuestra experiencia en la edición portuguesa del prestigioso festival catalán.
NOS Primavera Sound 2018
Pusimos pie en Oporto y, en el centro de la ciudad, en Avenida dos Aliados, pudimos disfrutar del primer concierto con el que se daba inicio al NOS Primavera Sound 2018. Fatboy Slim fue el responsable de dar el pistoletazo de salida y calentar motores haciendo bailar a todo aquel que estaba por esta gran avenida, tuviera o no abono para el festival. Norman Cook lo tuvo claro, sólo hace falta «Eat, Sleep, Rave, Repeat» para disfrutar al máximo del festival. Y así comenzó su gran actuación, el DJ británico nos ofreció una hora y media de baile y electrónica en la que no hubo descanso. Nos llevó de vuelta a los 90, disfrutando de temas como «Eye of the Tiger» de Bon Jovi o «Radio Gaga» de Queen, pero también agradando a los más jóvenes con temas como «Jungle Bae» de Skrillex y Diplo, acompañando en todo momento sus temas con unos impactantes visuales.
Durante su sesión, levantó voces y bailes al ritmo de «Funk Soul Brother», «Renegade Master», «Seven Nation Army» o «Jump Around». Norman Cook no dio tregua ni al público ni a si mismo, que no paró de moverse en toda su actuación.
El final del concierto llegó con «Praise You», un pequeño snippet de «(I Can’t Get No) Satisfaction», «Rockafeller Skank» y un sincero agradecimiento a todos los allí presentes. Gran calentamiento para disfrutar al máximo de los tres días que venían por delante.
Justo antes de Fatboy Slim pudimos disfrutar de una brillante sesión por parte de SuM, la DJ portuguesa que tuvo la responsabilidad, durante casi dos horas, de ir animando el ambiente en la avenida principal de Oporto.
Jueves, 7 de junio
Nos estrenamos en el recinto de Parque da Cidade para disfrutar de Waxahatchee en el escenario principal. El grupo americano liderado por Katie Crutchfield aprovechó la ocasión para presentar su más directo y pulido trabajo hasta la fecha, «Out in the Storm», que cumplirá un año el próximo mes de julio. Aún así, no dejó de lado el «Ivy Tripp» ni el «Cerulean Salt», de los que pudimos escuchar «Poison», «Misery Over Dispute», «Peace and Quiet» o «Under a Rock», entre otros. Este gran comienzo estuvo marcado por las incisivas letras en temas como «Never Been Wrong», «Sparks Fly» o «No Question», que calaron en el público más madrugador del festival. La artista norteamericana se mostró muy segura y agradecida, e incluso se atrevió con unos versos a capella de «Homemade Dynamite» de Lorde, con la que compartía escenario en este primer día.
A continuación, en el escenario inmediatamente contiguo (Super Bock), llegó el turno de Starcrawler. La jovencísima banda de Los Ángeles entró en escena con muchísima fuerza y nos ofreció una gran performance de rock: posturas imposibles, gestos sugerentes e incluso sangre por los aires. «Castaway» y «Used To Know» dieron comienzo a su actuación, más adelante declararon el amor por su ciudad natal con «I Love LA» y, tras unas cuantas canciones de su álbum debut, finalizaron por todo lo alto con «Pussy Tower», su personal oda al sexo oral; «Train», en la que la cantante, Arrow de Wilde, besó al público con sangre por toda su boca; y una «Chicken Woman» adornada con la guitarra de «Thunderstruck» de AC/DC.
En el escenario Seat, unos 20 minutos más tarde de la hora establecida, pudimos ver a Father John Misty con una gran banda a sus espaldas. La espera mereció la pena en cuanto empezó con «Nancy From Now On», «Chateau Lobby #4 (in C for Two Virgins)» y «Total Entertainment Forever», para continuar con algunos de sus nuevos temas como «Disappointing Diamonds Are the Rarest of Them All», «Mr. Tillman» o «Please Don’t Die» y finalizar con «The Ideal Husband», todo acompañado de unas constantes características épicas.
El plato fuerte de esta primera jornada fue Lorde. La cantante neozelandesa, agradecida y entusiasmada desde el primer momento, devoró el escenario y emocionó a todo el público desde su primer tema: «Sober». Ensayadas coreografías e impactantes visuales fueron la tónica general de un concierto digno de recordar, en el que la joven cantante desgranó su aclamado último álbum, «Melodrama» (Universal, 2017) —que cumplía casi un año—, prácticamente al completo, con temas como un vibrante «Homemade Dynamite» y unos sentidos «The Louvre» y «Liability». Aún así, no dejó de lado las canciones que la llevaron a sonar en las principales emisoras de radio hace unos años, como son «Tennis Court», «Magnets», «Royals» y «Team», que encajaron a la perfección en un show que terminó por todo lo alto con «Green Light».
La fiesta no podía parar y llegó el turno del rap de Tyler, the Creator. El rapero americano floreció con su último álbum, «Flower Boy» (Columbia Records, 2017), y así lo demostró desde el primer tema del concierto, toda una declaración de intenciones: «Where This Flower Blooms». Como una apisonadora, Tyler encadenó canciones ya clásicas como «OKRA», «IFHY» o «Tamale» con algunos de sus nuevos hits: «Boredom», «911 / Mr. Lonely», «Who Dat Boy», «November» o la guinda final protagonizada por «See You Again», con la que se desató la locura en el escenario Seat del Parque da Cidade.
Para poner punto y final a una brillante primera jornada, Jamie XX fue el encargado de cerrar el escenario NOS. El productor londinense nos regaló una magnífica sesión de electrónica en la que, a pesar de echar en falta algunos de sus temas propios, pudimos gozarlo y quedarnos con muy sabor de boca tras un remate con su popular «Gosh» y con «Psycho Killer».
Viernes, 8 de junio
La jornada del viernes dio comienzo con un tiempo maravilloso, ni una gota de agua y un sol muy acogedor que ya indicaba lo agradable que iba a ser el segundo día del festival.
A ritmo de IDLES comenzamos a calentar motores. La banda de punk rock de Bristol no dio ni un respiro con su gran fuerza sobre el escenario. Temas como «Faith in the City», «Mother», «Danny Nedelko» o «Rottweiler» fueron muy bien recibidos entre un público en el que pudimos ver los primeros pogos de la jornada. Mucha potencia, intensidad y sudor por parte de los ingleses, correspondiendo así a los asistentes que también lo dieron todo hasta el final, cuando un solo de guitarra y de batería dieron por concluido el paso de IDLES por el festival.
En el escenario SEAT nos esperaba Mattiel. La cantante de Georgia se presentó descalza y muy animada y nos regaló un concierto muy potente en el que su característica música resonó por todo el escenario. Pudimos disfrutar de temas como «Baby Brother», «Send It on Over» o «Count Your Blessings», antes de rematar con una prometedora «Detroit Riot» aún por lanzar.
A continuación estrenamos el escenario Pitchfork para disfrutar de las gemelas cubano-francesas Ibeyi. Estas dos mujeres cantan en español, francés, inglés y yoruba y, al comienzo de su concierto, aclararon que «Ibeyi» significa gemelas, justo antes de arrancar con «I Wanna Be Like You». Nos emocionaron con una actuación repleta de sonidos de lo más extravagantes y llena de fuerza y pasión, en la que pudimos escuchar una muy celebrada «Deathless», «Me voy» y «River», entre otras. Se marcharon con un pequeño reprise de «Deathless» que nos dejó a todos con una gran sonrisa y con las pilas totalmente recargadas.
Al escenario principal, NOS, llegaba el deseado rapero californiano Vince Staples. El rapero de «North Long Beach» entró pisando con decisión el escenario y abrió su actuación con su nuevo tema «Get The Fuck Off My Dick» y todo el público enloqueció. Temas de su reciente álbum «Big Fish Theory» (Def Jam Recordings, 2017) como «745», «Rain Come Down» o «Yeah Right», junto a canciones ya clásicas como «Norf Norf», «Primadonna» o «Lift Me Up», además de «Ascension» —su particular colaboración con Gorillaz—, llenaron el setlist de emociones y de muy buen rollo para que todos los allí presentes pudiésemos disfrutar de una actuación realmente eléctrica. Saltos, pogos, grandes visuales, complicidad con el público y mucha energía fueron los puntos clave para el gran sabor de boca que nos dejó Vince al finalizar su show.
Era el turno para Fever Ray en el escenario SEAT. La cantautora sueca, Karin Dreijer, antigua integrante del dúo de electrónica The Knife, junto con su banda formada por cinco mujeres nos regalaron un auténtico espectáculo repleto de música en directo, con teclados, tambores y demás instrumentación, además de coros, bailes de todo tipo y una presencia en el escenario con todas ellas vestidas con ropas estrafalarias y coloridas e incluso disfrazadas de «michelín». Presentó su reciente y aclamado álbum «Plunge» (Rabid Records, 2017), con letras que tratan principalmente el tema de la libertad y la educación sexual. «An Itch» dio comienzo al vibrante concierto y, tras un sin parar de hits, el tema principal de la serie Vikings («If I Had a Heart»), «Mama’s Hand» y «I’m Not Done» cerraron la actuación de las suecas.
Para finalizar la segunda jornada del NOS Primavera Sound, A$AP Rocky fue el encargado de poner el broche de oro. Con «Distorted Records» dio el pistoletazo de salida de su particular baño de masas, que continuó con «A$AP Forever» y «Kids Turned Out Fine», dando paso a una coreadísima «L$D». Además de con ésta, los momentos más álgidos del concierto se vivieron con las canciones «RAF», «Fuckin’ Problems» y «Wild For the Night», interpretada justo antes del punto y final a la actuación que llegó con «Yamborghini High», del colectivo A$AP Mob.
Sábado, 9 de junio
Acompañados de la lluvia, empezamos el último día de la mano de Belako, uno de los tres artistas españoles que actuaban en esta jornada. Al grupo de post-punk vasco no le frenó en ningún momento el mal tiempo y, con muchísima fuerza y potencia, nos regaló un conciertazo de principio a fin. Con la mayor parte de sus canciones cantadas en inglés, pero otras en euskara, nos hicieron disfrutar de temas como «Eat Me!», «Nomad», «Zaldi Baltza» o «Haunted House».
Inmediatamente después y en el escenario contiguo, dio comienzo el dulce pero potente R&B de Kelela. La cantautora etíope-americana, a pesar de haber publicado recientemente «Take Me Apart» (Warp Records, 2017), copó su setlist de temas más antiguos como «A Message», «Gomenasai», «Enemy» o «Rewind». Aún así, también pudimos disfrutar de algunas de sus nuevas canciones: «LMK», con la que abrió su actuación, «Frontline», «Blue Light» y «Take Me Apart». Un concierto precioso que nos dejó con ganas de ver mucho más de esta brillante artista.
Tras un pequeño descanso volvimos a la carga con Public Service Broadcoasting. La banda londinense, caracterizada por utilizar samples de material de archivo, nos brindó una magnífica actuación. «Theme From PSB», «Signal 30» y un par de canciones del reciente álbum «Every Valley» (Test Card Recordings, 2017) —«Progress» y «They Gave Me a Lamp»— caldearon el ambiente antes de llegar a un apoteósico final con «Go!», «Gagarin» y «Everest».
Bajo una incesante lluvia llegó el turno del plato fuerte de la jornada: Nick Cave & The Bad Seeds. El mítico músico australiano levantó pasiones en un concierto cargado de emoción, y es que la unión entre público y artista fue latente desde la primera nota de «Jesus Alone», con la que dio comienzo a su particular viaje. La lluvia dio un toque épico extra a una actuación en la que miles de voces cantaron temas tan legendarios como «Red Right Hand», «Into My Arms» o «Push the Sky Away», además de otros más recientes como «Magneto» y «Girl In Amber». Brutal.
Tocaba cambiar el estilo totalmente, y fuimos a disfrutar del R&B de ABRA en el escenario Pitchfork. La cantante de Atlanta nos regaló un set lleno de hits como «CRYBABY», «PULLUP», «Fruit» o «I Guess», con la que puso la guinda final a su concierto. Un sin parar de bailes, tanto por parte del público como por parte de Gabrielle Mirville, que logró llenar el escenario a pesar de presentarse sin compañía alguna.
Nos quedamos en este mismo escenario para presenciar la fiesta del dancehall de Bad Gyal. La cantante catalana presentaba su reciente trabajo «Worldwide Angel» (Puro Records / CANADA, 2018) y pudimos disfrutar de temas del mismo como «Internationally» o «Blink». Acompañada de dos bailarinas, Alba no ofreció descanso y, hit tras hit, hizo que todos nos viniésemos más y más arriba. Se hizo de rogar, pero no faltó su popular «Fiebre» como cierre por todo lo alto de su actuación.
Pusimos fin al día de la mano de Arca. El DJ y productor venezolano nos sorprendió con un concierto en el que no pudimos escuchar nada de su brillante álbum debut, «Arca» (XL Recordings, 2017), sino que vivimos una experiencia audiovisual… «distinta». A gusto de unos y disgusto de otros, Arca hizo lo que quiso en un frenético y desconcertarte show con el que dijimos adiós a la presente edición del NOS Primavera Sound.
¡Nos vemos en 2019!